¿Quienes somos?

«El individuo deja de ser él mismo; adopta por completo el tipo de personalidad que le proporcionan las pautas culturales, y por lo tanto se transforma en un ser exactamente igual a todo el mundo y tal como los demás esperan que él sea»
Erich Fromm

Si alguien piensa que vamos a aceptar que el arte corporal: para nosotros, el tatuaje, el piercing y cualquier modificación, sin atentar (en nuestro caso) ciertos pre conceptos estéticos, está globalizado, se equivoca. A nuestro equipo, nos tiene sin cuidado que existan cientos de tiendas en el mundo, miles de convenciones, unas decenas de miamis ink, y que todos crean, jóvenes y adultos que lo están inventando o se lo están viviendo por moda o conveniencia, Antiques Tattoo seguirá creyendo en la verdadera esencia del arte corporal. No es para menos, el título de la entrada es: ¿quienes somos? Somos eso, la piedra de la talla casi perfecta, somos los hacedores de un trabajo ancestral patente en todas las culturas, donde el hombre sólo siente la necesidad de trascender ornando su cuerpo. Los trabajos en serie, los tatuajes hechos a prisa, el diseño manido, el piercing torcido, hacer el trabajo por dinero o simplemente por hacerlo, la construcción de un "miami ink" de puros mamarrachos... un arte así, hecho por nuestro equipo: ¡Jamás!. contamos con un tatuador extraordinario, con una magia para el tatuaje el cual ejerce con éxito desde hace algunos años, y al contrario de sus competidores no hacen falsos alardes que no sean tangibles, un excelente piercer, Y yo, Marianela Cabrera, al igual que todos en este equipo, unos más otros menos, dueña de la tienda, quien me presto para escribir, y contarles todo esto... he hecho tantas cosas que ahora desde aquí soy anticuaria, escritora y amante de todo lo que sea bello. Decía Thomas Mann en su Tonio Krüger: "Si hay algo capaz de transformar a un literato en poeta es este amor burgués que yo siento por lo humano, lo vivo y lo vulgar, pero mi amor más profundo y más intimo pertenece a los rubios y de ojos azules, a los seres intensamente dinámicos, a los dichosos, a los amables y a los vulgares ... no me eche en cara este amor, es bueno y fecundo. Encierra nostalgia, envidia, melancolía un poquito de desprecio y una felicidad enteramente casta"